Mercados e Instrumentos Financieros
01-06-2017
Los tipos de inversores se pueden clasificar según dos criterios:
Inversores estables: son inversores que operan con valores con los que es posible obtener encontrar una elevada rentabilidad por dividendos sin asumir excesivo riesgo. No adquieren o venden títulos de forma especulativa, sino que efectúan operaciones más estables con una perspectiva a medio y largo plazo, por lo que no sufren con gran intensidad las fluctuaciones a corto plazo de las cotizaciones y tampoco no consiguen revalorizaciones espectaculares por la asunción de menor riesgo e inversión a largo plazo. Los inversores medios, con una capacidad de gasto media y adversos al riesgo, eligen empresas solventes y de gran liquidez que distribuyen dividendos regularmente y desarrollan su actividad en sectores económicos de futuro.
Inversores especulativos: invierten en valores donde es igualmente posible obtener importantes ganancias o en su lugar pérdidas elevadas. Como quiera que funcione el mercado, al alza o a la baja, buscan comprar a un precio dado y vender a un precio superior de forma rápida. Son inversores a corto plazo e invierten de forma especulativa por lo que están atentos a la evolución del día a día de los mercados y cuentan con suficiente capacidad de maniobra para actuar con rapidez.
Inversores institucionales o grandes inversores: son organizaciones -bancos, cajas, compañías de seguros, etc.- que invierten su dinero o el de terceros a través de fondos de inversión, pensiones, etc. Disponen de servicios de estudios, amplia información recibida con rapidez y sistemas de información, análisis y gestión. Cuentan con la ventaja de poder ejercer, en ocasiones, una influencia sobre el precio, ya que suelen tener ciertos porcentajes de acciones de las sociedades cotizadas y operan con gran volumen de efectivo.
Inversores particulares, pequeños inversores o minoristas: tienen menos información que los grandes inversores y basan sus decisiones en la información financiera proporcionada por la prensa, televisión, etc. Son inversores que colocan en el mercado pequeñas cantidades de ahorro.